Dale un descanso a tu digestión

Dale un descanso a tu digestión

¡Amamos el descanso en todos los sentidos! Y esto incluye la digestión.


¿A qué me refiero con esto? Hay que darle pausas a nuestro intestino para que descanse y se pueda recuperar, y puedo darte muchas razones para hacerlo.


Esa idea de que “comer cada 3 horas acelera tu metabolismo” no es del todo correcta. Claro que como en todo, se trata de bio individualidad. Habrá personas a las que les funciona perfecto este esquema o incluso lo necesitan por algún tema médico. Pero si estamos tratando de sanar alguna condición intestinal, la verdad es que no deberíamos estar comiendo todo el día.


Al hacer esto, nuestro sistema digestivo está trabajando sin parar y no tiene tiempo de recuperarse. Tener comida en el estómago constantemente nos puede llevar a un crecimiento excesivo de bacterias, inflamación, gases o estreñimiento. 


Te voy a platicar un poco sobre la señora de limpieza que tenemos en nuestro intestino. La conocemos como “Complejo Motor Migratorio”, y es esta especie de ola que tenemos cada 90 minutos aproximadamente (en ayunas) y su función es la de limpiar el tubo digestivo de restos alimenticios e impedir el sobrecrecimiento de bacterias. Así que si no tenemos periodos de ayuno en el día, pues a la señora de limpieza no le da tiempo de barrer.


Otro punto importante es que yo sé que a veces cenamos y después hacemos otras cosas y se acerca la hora de dormir y nos da ese antojito de comer un último snack. Pues esto tampoco lo recomiendo por 2 razones: la primera es que puede provocar reflujo y la segunda es que volvemos a lo mismo…si tu cuerpo está ocupado haciendo la digestión, no tiene tiempo de preocuparse por dormir bien y descansar. Es muy sabio el cuerpo y puede hacer mil funciones, pero tenemos que darle su tiempo y espacio a cada una. Siempre recomiendo que tu último alimento sea por lo menos 2 horas antes de dormir.


Puede sonar difícil dejar los snacks pero de verdad que si tus comidas más importantes (ya sea que elijas 1, 2 o 3), están completas y balanceadas, ni siquiera se te cruzará por la mente comer entre comidas. Por eso es fácil crear una nueva rutina con estos espacios entre una comida y otra.

A mi me ayudó muchísimo para controlar síntomas cuando tenía SIBO. Hacía (y sigo haciendo hasta la fecha) 3 comidas al día con un espacio de 4 horas entre una y otra. Así evito inflamación y malestar. Mis horarios son: Desayuno 10 am / Comida 2 pm / Cena 6:30 pm. Así termino de cenar temprano y le doy a mi cuerpo unas buenas 15 horas de ayuno hasta el siguiente desayuno, lo que también es de mucha ayuda. En otro artículo les hablaré sobre el ayuno intermitente. 


Ahora…¿Ya te convencí? ¿Estás lista para darle un respiro a tu intestino pero no sabes por dónde empezar? Checa estos consejos:

  • No piques entre comidas. Come tus comidas ricas en nutrientes con muchas verduras, proteínas y grasas saludables. Tu cuerpo se sentirá satisfecho y será más fácil rechazar esas galletitas que te ofrecieron en la oficina.
  • Ya no comas después de la cena. Cuando lo hacemos no suele ser cuestión de hambre sino de antojo o ansiedad. Tómate un tiempo para examinar por qué está pasando esto. ¿Es un mal hábito por ver TV? ¿Estás aburrida? ¿Estresada? ¿Cansada? ¿Comiste lo suficiente durante el día? Mejor prepárate una taza de té y siéntate para llegar a la verdadera razón por la que estás comiendo a deshoras. Y la solución más fácil de todas: duérmete.
  • Si quieres llevar el "tiempo de inactividad intestinal" a otro nivel, consulta el ayuno intermitente con tu nutrióloga o doctora para obtener aún más beneficios para la salud, como pérdida de peso, más energía y antienvejecimiento.

Y quédate tranquila que nuestro cuerpo está hecho para comer 1 vez al día o hasta para pasar días sin comer y no nos pasará nada. Nuestros ancestros sobrevivían a la perfección y NO SIEMPRE tenían comida. Podían pasar días antes de cazar el próximo mamut. Somos nosotros y nuestra sociedad los que nos hemos hecho creer que tenemos que estar comiendo 24/7 para que no “nos de el soponcio”. No te dará. Al contrario, te ayudará.


 

Regresar al blog

Deja un comentario